En 1976, TAG Heuer lanzó el modelo Monza, llamado así por el mundialmente famoso circuito italiano de Fórmula 1. Cuarenta años después, el Monza Calibre 17 recuerda los días gloriosos de las carreras y ofrece más que un diseño vintage. Siga leyendo para obtener una revisión detallada de los archivos de WatchTime y las fotos originales de OK-Photography.
Hay buenas noticias para los fans del look retro: Monza está de vuelta. Buenas noticias también para los fanáticos de las carreras, con un diseño tan vibrante y lleno de referencias automotrices como la versión original de 1976. También es notable porque la réplica TAG Heuer ha probado una versión más refinada en los últimos 15 años sin el revestimiento negro y los elementos de esfera incoloros.
El Calibre 15 tiene una pequeña subesfera de segundos situada a las 10 en punto, lo que le da al Monza original un aspecto sorprendentemente asimétrico. TAG Heuer ha omitido este audaz elemento de diseño en su última versión, en parte debido al uso del movimiento ETA 2894, conocido en TAG Heuer como Calibre 17. Este movimiento estándar invierte la posición de los pequeños contadores de segundos y minutos y mueve la corona a el lado derecho de la caja.
Estos cambios favorecen al nuevo Monza, dándole un aspecto deportivo y relajado sin ser tan característico como el original. Lo que sea que pierda en términos de frescura, lo gana con el acabado pulido y mate de la caja en forma de cojín. El titanio contribuye a su excelente comodidad de uso, y el revestimiento de carburo de titanio lo hace muy resistente a los arañazos.
El ETA 2894 es un reloj modular basado en el movimiento de tres manecillas ETA 2892, por lo que la corona se coloca más abajo en la caja que los pulsadores del cronógrafo. A pesar del tamaño de los pulsadores, sus puntos de presión no son perfectos. El botón de inicio y parada en el reloj que probamos tuvo un retraso notable en responder al cronometrar.
Los resultados de las tasas de las mejores réplicas de relojes fueron generalmente aceptables. Sin embargo, el momento registró un valor atípico en la posición de «marcar hacia abajo», lo que afectó negativamente los resultados promedio de nuestras rigurosas pruebas de tasas. En el lado positivo, hubo una baja ganancia de 2,5 segundos por día sin que se encendiera el cronómetro del medidor, en comparación con 4,5 segundos por día mientras se ejecutaba. Las pruebas de desgaste en la muñeca mostraron desviaciones entre 0 y +6 segundos por día.
La correa de piel de becerro perforada también encaja a la perfección con el atractivo automovilístico del diseño Monza, al igual que la caja deportiva y la pantalla estilo salpicadero. La correa termina en un cierre desplegable funcional y bien ejecutado con pulsadores de titanio con revestimiento de PVD. Su mecanismo de cierre de sujeción permite un ajuste preciso. Comprime la correa cuando está cerrada, aunque no tanto como un reloj con cierre.